Desde el MSP se comunicó que el principal objetivo de esta tercera dosis es fortalecer la inmunidad de la población ante la posibilidad de nuevas variantes que generan preocupación.
En virtud de la recomendación de la Comisión Nacional Asesora de Vacunas y el grupo ad – hoc, el Ministerio de Salud Pública (MSP) aprobó la tercera dosis de la vacuna contra covid-19 a todas las personas que recibieron esquema primario con la vacuna Coronavac del laboratorio Sinovac y AstraZeneca.
La agenda se abrió este martes y se anotaron unas 560.000 personas en menos de diez horas, tal como informó José Luis Satdjian, subsecretario del Ministerio de Salud Pública (MSP). «En los próximos días estaremos asignando los cupos correspondientes», indicó Satdjian.
El pasado jueves el MSP nuevamente emitió comunicado, en el cual brinda explicación sobre por qué se aplicará una dosis de refuerzo en inmunodeprimidos y población en general. El informe indica que, desde que comenzó la campaña de vacunación, investigadores y expertos han analizado la duración de la inmunidad generada por la infección y la que se genera a través de las plataformas vacunales en población general y en grupos de personas.
En este aspecto, se hace hincapié en que durante toda la campaña de vacunación se tuvo en cuenta que algunas personas por su condición de salud, medicación o edad no pudieron desarrollar una respuesta inmune adecuada después de la serie primaria y que podría necesitar una dosis adicional para lograr una «inmunidad protectora».
«La campaña de vacunación contra COVID-19 basada en tres vacunas: CoronaVac, Pfizer y AstraZeneca, ha sido muy exitosa logrando altas coberturas vacunales que redundaron en una caída marcada en casos, internaciones y fallecimientos. Uruguay ha monitorizado la campaña de vacunación tanto con estudios de efectividad como con estudios serológicos postvacunales en personal de salud y en población general», indica el comunicado.
Por otro lado, en función de datos obtenidos por el MSP al 30 de junio se evidencia que la efectividad del esquema primario de Pfizer de 78% para reducir la infección, 97,8% para reducir la internación en CTI y 96,2% para reducir la mortalidad. En tanto, con CoronaVac la efectividad es de 59,9% para reducir la infección, 90,8% para reducir la internación en CTI y 95 % para reducir la mortalidad.
En ese orden, el MSP decidió brindar una tercera dosis por tres motivos principales: optimizar la respuesta inmune en grupos especiales que presentan una respuesta subóptima; aumentar la inmunidad global en la población, homogeneizando el uso de plataforma ARNm; y fortalecer la inmunidad de la población ante la posibilidad de nuevas variantes de preocupación, en especial la delta.
Según el informe del MSP, con respecto a los inmunodeprimidos hay trabajos internacionales que demuestran que, en grupo de trasplantados de órganos sólidos hepáticos, renal, corazón, pulmón y páncreas, a los 28 días de la segunda dosis, el 46% no tenía anticuerpos detectables.
«En los pacientes con cáncer, especialmente los hemato-oncológicos demostraron menor respuesta de anticuerpos; en especial aquellos que recibieron inhibidores de células B y T encargadas tanto del control de la infección como de la generación de anticuerpos y células de memoria a largo plazo», anexa.
Con respecto a datos preliminares nacionales del Programa Nacional de Trasplante Hepático, se observó que solo el 40,3% desarrolló anticuerpos a los 40 o 60 días de la segunda dosis de aquellos que completaron el esquema primario. «Si bien el menor desarrollo de anticuerpo se evidenció con las dos plataformas, se observó menor respuesta con la vacuna CoronaVac», indica el texto.
«De igual forma, la generación de anticuerpos en los pacientes con trasplante renal y renopáncreas fue baja y los títulos de anticuerpos fueron menores que los obtenidos en la población general», enuncia el informe.
Es por este motivo que, para este grupo de persona, si recibió un esquema primario con la vacuna de Sinovac se ofrece recibir dos dosis de Pfizer con un intervalo de 28 días entre vacuna y vacuna, y se añade que el intervalo debe ser de al menos un mes.
Si el esquema primario fue con vacuna Pfizer o AstraZeneca, se ofrece una dosis al menos un mes luego de la última dosis inoculada del esquema primario. Las personas en diálisis crónica recibirán las dosis en su centro de diálisis, mientras que los demás inmunodeprimidos deberán agendarse.
En tanto, para la población en general se ofrece dar una tercera dosis para los pacientes que hayan recibido esquema primario con CoronaVac buscando «reforzar la inmunidad», debido a la «caída natural de los anticuerpos neutralizantes» y al riesgo de las variantes de preocupación que ya ingresaron a Uruguay.
Con respecto a estas variantes, el MSP indicó que la variante delta representa un riesgo peculiar porque se asocia un mayor rango de infección, especialmente en personas no vacunadas, con esquemas incompletos o cuyos niveles de anticuerpos hayan disminuido.
«La capacidad de los anticuerpos para neutralizar a la variante delta se reduce entre 5 y 8 veces en comparación al virus original. Hasta la fecha los reportes de salud pública en Canadá, Israel y Reino Unido han demostrado una reducción en la efectividad de las vacunas de ARNm y vector viral frente a Delta (en especial en aquellas con esquemas incompletos», afirma.
«Para CoronaVac los estudios preliminares marcan una reducción mayor a 30% de la eficacia de la vacuna frente a la infección sintomática, con probabilidad de infección en personas completamente vacunadas. Existe evidencia, a través de modelos predictivos, estudios in vitro y reportes preliminares, de infecciones en personas completamente vacunadas en zonas con circulación activa de variante Delta», indica el comunicado.
El informe publicado hace referencia a la pérdida de anticuerpos, que «disminuyen a lo largo del tiempo» y con esto los datos iniciales obtenidos en los ensayos clínicos de la vacuna «pueden variar». «El mantener niveles detectables de anticuerpos se ha asociado a una mayor capacidad para evitar la infección asintomática, la enfermedad clínica y la mortalidad», afirman.
«Estudios internacionales demuestran que en personas que cursaron la infección y aquellas que fueron vacunadas, existe un descenso significativo de los anticuerpos a los 3 meses de completado el esquema. Esta reducción natural tendría un impacto en las vacunas según su eficacia inicial reportada, la cual se vería reducida de un 95% a un 77% y ante una eficacia inicial del 70% se prevé que la respuesta baje a un 33% de eficacia, a los 250 días. La disminución de la capacidad neutralizante estaría asociada a la edad, comorbilidades, y el tiempo de vacunación», sostiene.
A nivel de Uruguay, existen estudios -según el MSP- en las que se evidencia una disminución en los títulos de anticuerpos, sobre todo en aquellas inmunizadas en el primer período de la campaña. Con este antecedente, la cartera de salud entiende es más probable que sea necesario «mantener niveles de anticuerpos más altos frente a la circulación de VOCs».
Por último, el texto explica que se denomina «esquema heterólogo» a aquel donde se aplican vacunas de diferentes laboratorios. El informe muestra evidencia de estudios internacionales que afirman que, cuando se combinan vacunas de vector viral (Sinovac) con virus inactivado con ARNm (Pfizer), la aplicación del refuerzo aumentaría los niveles de anticuerpos neutralizantes y la respuesta de células T, con buen perfil de seguridad.
«Así mismo, en el seguimiento de personas en quienes se aplicó un esquema heterólogo por contraindicación médica (p.ej: alergia grave) no se notificaron efectos adversos. Esto también se evidenció tras la decisión de personas quienes recibieron esquemas heterólogos en otro país. La aplicación de esta tercera dosis con vacuna de ARNm (Pfizer) se dará a partir de los 90 días de la 2da dosis en aquellos que recibieron un esquema inicial con vacuna de virus inactivado (CoronaVac)», explican.
Para concluír, el comunicado añade que, si bien la disminución de los anticuerpos ocurre con todas las vacunas que fueron suministradas en Uruguay, los títulos iniciales son mayores con Pfizer que con CoronaVac y la necesidad de refuerzo sería más precoz con esta vacuna. Es por esta razón que surge la propuesta de una tercera dosis a quienes recibieron el primer esquema con la vacuna de Sinovac.