Emilio Tebot es un Fraybentino que salió de su hogar a estudiar en Montevideo y no regresó. Recorre el mundo en distintos cruceros. Su profesión le ha permitido conocer diferentes mares y ríos del mundo. La pandemia lo sorprendió en su Fray Bentos natal y el regreso al agua se ha retrasado
Emilio nace en Fray Bentos en 1980, en la cuna de una familia vinculada a la rica historia de esta ciudad, actualmente tienen 39 años y su historia como Piloto de Marina Mercante comienza en el 2006 cuando finaliza sus estudios en la Escuela Naval. Navegó durante un año, lo cual es necesario para obtener el título de 2do oficial, para luego juntar tiempos, hacer exámenes y de esta manera ir ascendiendo de segundo oficial a primer oficial y después obtener la patente de Capitán. “Yo por ejemplo tengo mi patente, ahora está limitada hasta 3000 toneladas de tonelaje”, nos explicó.
El Rionegrense le preguntó cómo fueron sus inicios una vez que se gradó en la Escuela Naval, “comencé a trabajar navegando en el Mar del Norte entre Inglaterra y Francia en un buque mercante, luego me vine a Uruguay y continué trabajando en el Río Paraná. Conocí el Mar del Norte Báltico, salíamos de un puerto en Inglaterra, pasando por Ámsterdam hasta llegar a los Fiondos Noruegos. Durante un año trabaje en un yate privado de un millonario, la nave era de 50 metros aproximadamente, que tenía un globo aerostático”.
Luego regresó a Uruguay y comenzó a trabajar en Norwegian Cruise Line, siendo esta su primera experiencia en un crucero. Destacó que cada contrato era en un barco distinto, lo que le permitió trabajar y conocer el Norwegian Jewel, Norwegian Sun y Norwegian Epic.
Emilio nos contó que “la empresa, Norwegian Cruise Line, había venido a la Escuela Naval de Uruguay y empezaron a tomar cadetes de acá, para hacer el pilotinaje y como yo ya tenía todo, me fui directamente como 2do oficial”. Entre risas detalló, “todos los lunes le enviaba un email a una persona encargado de reclutar personal para los cruceros, hasta que un día me llaman y me dicen, te puedes venir, y conteste si, cuando? pregunte, mañana me dijeron, yo respondí, no mañana no puedo porque estoy en Montevideo, y debo buscar mis cosas en casa, así que vine busque todo y me fui hasta el 2009”.
“Desde el 2011 – 2012 estoy en la Royal Caribbean, donde he hecho carrera, estando en dos cruceros, Brilliance of the Seas, Anthem of the Seas, ahora voy al Ovation of the Seas y luego al Radiance of The Seas”.
En relación a su avance en el ámbito laboral explicó que “al principio los contratos fueron más largos primero trabajaba seis meses y tenía dos meses de vacaciones, después logre hacer tres meses y medios de trabajo por tres meses y medio de vacaciones y actualmente hago 10 semanas embarcado y diez semanas de vacaciones”.
Hoy por hoy Emilio Tebot es Chief Officer (Jefe de operaciones o Director de operaciones) la siguiente posición es ser Capitán, “la compañía decide cuando ascender y cuando este pronto me ponen un barco de capitán”.
¿Dónde estabas cuando se desencadena la Pandemia?
La declaración de la emergencia sanitaria y el parate del mundo lo sorprendió en Uruguay. “Yo había llegado de vacaciones el 12 de enero y me embarcaba el 20 de marzo, pero el 15 de marzo cierran todos los aeropuertos y me tuve que quedar acá”.
Sobre su futuro contó “Ahora me voy el 3 diciembre a Filipinas a tomar el Ovation Of The Seas y hacer un mes de cuarentena dentro del barco, y después voy a Singapur y me monto el Radiance Of The Seas”.
Asimismo aclaró que si bien las compañías de cruceros no están realizando viajes en estos momentos de pandemia, se estará trabajando en todo lo que es el mantenimiento de las embarcaciones.
Sobre su vida personal contó que aún no tiene hijos, ni esposa, ni novia. Reconoce que se ha enfocado en su desarrollo y crecimiento profesional. Sobre la distancia y el contacto con su familia detalló “lo llevo bien, ahora con la tecnología es bastante fácil, al principio cuando me fui en el 2006 el internet no era tan accesible como lo es ahora, era bastante difícil comunicarse en esa época, pero ahora en el barco tenemos internet satelital así que yo estoy en contacto todos los días, con mi madre, con mi padre, con mi hermano y cuando tenía novia, con mi novia”. Sobre su experiencia para relacionarse con personas de diferentes culturas expresó “mi mejor amigo ahora en el barco era un venezolano, son parranderos, muy parranderos, me lo contagio. Aún no bailo salsa pero si cumbia”. Su trabajo le ha permitido hacer amistades por todo el mundo.