El Parque Liebig’s estrenó un sistema automatizado de riego que ya está en pleno funcionamiento, marcando un avance significativo en la gestión del espacio deportivo.
El sistema consta de siete líneas con 35 aspersores estratégicamente distribuidos en paralelo a calle Brasil y hacia Plaza Bozzo, asegurando una cobertura total del campo de juego. Además, cuenta con tres fuentes de abastecimiento de agua: un pozo semisurgente, un tanque australiano y el arroyo Laureles.
Este mecanismo puede ser preprogramado según horarios definidos, pero también permite la operación manual, ofreciendo flexibilidad para adaptarse a las necesidades de cada evento. Por ejemplo, la cancha podrá ser regada durante el entretiempo de los partidos, mejorando las condiciones del césped.