Se visualiza en el corto plazo expandiéndose en la región.
En una nueva edición de la ExpoActiva Nacional, la número 25 que se hizo desear tras las suspensiones por la pandemia, el agro se volcó este 2022 tal vez como nunca antes en este evento. De hecho es el más grande en cuanto a la cantidad de expositores, unos 350; es la edición de más metros cuadrados para los stand y tiene este año un día más, comenzó el martes y no el miércoles como siempre sucedía.
En este contexto es que se hizo presente nuevamente Metalúrgica J. Hartwich, que en 2006 apareció por primera vez y ya desde 2008 con stand propio, hace de esta muestra una de las más importantes en la que dicen presente.
Carlos Hartwich que está al frente de esta empresa younguense con más de 50 años de historia nos contó que «nosotros vimos crecer la Expoactiva». Para él es fundamental la organización a quien agradece ya que «siempre están pensando ayudando a colaborar sobre todo en la parte de la activa. Da gusto estar presentes». Esta muestra sirve para estar en contacto con «mucho público, amigos y proveedores» y subrayó que «no todo es negocio, es compartir un momento también».
Metalúrgica J. Hartwich este año contrató 1000 metros para exponer «y nos quedó un poco apretado, nos hubiera gustado contratar más». Para Carlos, el buen momento del agro circunstancial, hace que sea un buen momento para hacer negocios. La empresa ha crecido exportando y reconoce que hoy «no es el mejor momento para exportar ni tampoco son los mejores años». Antes se daba que se concretaban exportaciones «importantes pero puntuales, ahora es más sostenido y diversificado».
De Uruguay a América y el mundo.
«Se está vendiendo maquinaria a Paraguay un mercado que ha crecido pero también lo hacemos a Colombia, Argentina y Brasil». Pero no sólo en América sino también para Europa. «Acabamos de embarcar para España un país que requiere más tecnología. Es un desafío para nosotros y nos gustó mucho. Ya hemos vendido a Australia y estamos conversando por equipos nuevos, también en Sudáfrica» indicó. La empresa se ha preocupado por «desarrollar equipamientos para otros mercados y esperamos seguir creciendo, algo en lo que hemos trabajado mucho».
De hecho el negocio de exportación a España surge por una necesidad detectada en Uruguay y cuya herramienta desarrollada es única en el mundo. Carlos Hartwich con orgullo nos contó que «es en la línea forestal donde hemos sido más innovadores».»Quien compra no piensa en el precio sino en la solución que brindamos, que en otro lado no existe» remarcó. «Es un equipo para replantación de árboles» que es 100% uruguayo «desarrollado acá y no hay en el mundo otra máquina de esas características».
Las forestales se encontraban que «después de una cosecha quedaba un colchón de ramas de árboles importantes» y ahí es que se desarrolla el equipo. Hartwich explicó esa necesidad surge «de las grandes forestadoras UPM y Montes del Plata. Les desarrollamos lo que nos piden y algunos se destacan en otros mercados» como lo es este equipo de replantación. «Hace 3 tareas en 1. Limpia la faja de siembra, hace subsuelado y afinado de la tierra en una sola operación».
Para él, el desarrollo de la tecnología se da en Uruguay por esa necesidad que por ejemplo en Brasil no existe a pesar de ser un país de amplio desarrollo forestal. Los norteños «al tener mano de obra menos costosa hace que haya una presión menor para mecanizar, algo que en Uruguay es más fuerte. Se presiona más a mecanizar porque el costo de mano de obra es el más alto de la región, y eso nos hace innovar».
Pensando en sucursales fuera del país.
Una característica de Metalúrgica J. Hartwich es que no tiene sucursales en otros puntos del país a pesar de vender en todo el Uruguay. Carlos, remarcó que la empresa confía en «la red de concesionarios, porque es gente conocedora del mercado local y que además toma maquinaria más vieja y brinda un servicio post ventas» que «se adecua y conoce al productor de la zona».
Sin embargo para ellos y en su plan de acción «a corto y mediano plazo se trazaron instalarse e ir a fabricar a Argentina o Brasil». Explicó que esto se da por la cercanía pero «son mercados muy proteccionistas y de los más fuertes en ese sentido de todo el mundo». «Vender ahí no es fácil sino se fabrica ahí, por eso el plan es a corto y mediano plazo» expresó.
El cincel de la «activa».
Cuando visitamos el stand, el producto fundamental que se pretende mostrar, aún no había llegado al lugar ya que un rato antes había estado en la parte «activa» de la expo. «Estamos mostrando la línea de cinceles una línea nueva, que es muy versátil para la preparación de suelo» contó. Este nuevo cincel permite «un laboreo de 27cm de profundidad o también para cama de siembra, además que se porta bien con alto volumen rastrojos porque se le agregó cuchillas de corte en el frente». «Tiene la ventaja de ser labranza vertical, por lo que permite trabajar con tierras muy húmedas». El cincel tuvo un excelente desempeño en la parte activa con rastrojo de maíz. «Esperamos que esta feria nos ayude a venderlo».
El negocio familiar, internet y redes sociales.
Para Carlos Hartwich es innegable que el negocio familiar creció. «Hoy tenemos 60 personas trabajando» donde hay ingenieros que desarrollan la tecnología y la máquinaria, así como también todos los empleados que componen la empresa.
Un desafío particular para alguien que está vinculado directamente a la maquinaria ha sido el desarrollo de las redes sociales. «En la empresa cada vez estamos más atento a internet y redes sociales». Ejemplificó que «hace apenas años muy pocas personas que iban a la empresa habían visitado nuestra página web, sin embargo hoy todos los que van o la enorme mayoría ya vieron el equipo antes en la web, en instagram o facebook». «Todo el mundo está atento a eso».
Reconoció con sinceridad que «obviamente nos costó entender el fenómeno, uno creía que facebook era para publicar fotos familiares y no para mostrar la maquinaria». Después «veíamos que los clientes publicaban fotos de las máquinas o su trabajo, también veíamos que otras empresas similares publicaban sus productos y no podíamos no estar». «Un poco por presión, tuvimos que hincarle el diente» y es allí donde se puede buscar y ver lo que se hace y lo que Metalúrgica J. Hartwich tiene.
Martín Rostán.