La instancia se llevó adelante hoy en la Torre Ejecutiva, en el marco del Día de la Exportación. También participaron la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche; el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado; la presidenta de la Unión de Exportadores, Andrea Roth, y el presidente del Banco República, Salvador Ferrer. El mandatario reconoció que gran parte de la agenda en la cual trabaja el Gobierno “viene desde el sector exportador y es natural que así sea”. Recordó el compromiso asumido de “agrandar el país hacia adentro”, en el sentido de que incrementar las oportunidades de desarrollo de los uruguayos debe ser la meta de un Estado funcional. “Agrandar el país no es agrandar el Estado”, dijo, y aclaró que se debe ganar en eficiencia y eficacia, estimular a los sectores que “empujan la economía” y aportar herramientas educativas y logísticas que estimulen el desarrollo.
En este punto, reiteró que el país debe ser receptor de migrantes provenientes de distintos puntos y que se instalen con sus familias. Explicó que Uruguay también debe “agrandarse hacia afuera” y analizó que la pandemia de COVID-19 ofrece oportunidades, pero también el riesgo de que ante la caída del comercio exterior se acentúe el proteccionismo. En este contexto, Uruguay debe apuntar a nichos de mercado con excelencia. “Si el país supera la pandemia medianamente bien, va a ser una marca que el mundo va a mirar más”, aseguró. Lacalle Pou insistió en que Uruguay reclama un sinceramiento de los socios del Mercado Común del Sur (Mercosur) cuya presidencia temporal ejerce. “El sinceramiento debe ser: ¿estamos realmente dispuestos a avanzar y terminar lo que empezamos con la Unión Europea?, ¿tenemos la noción de la necesidad y oportunidad que significa China?”, se preguntó. Ese país es el principal socio comercial de Uruguay y se incrementará la relación, advirtió. “Ojalá sea Mercosur mediante”, agregó.
En materia de comercio exterior, Uruguay no se va a quedar quieto, precisó el mandatario. Si el país necesita pelear por cuotas para el ingreso a determinados mercados, “lo vamos a hacer, y si tenemos que hablar de Gobierno a Gobierno, también lo vamos a hacer”, anticipó. En caso de que se necesite una política agresiva para solucionar problemas, mediante la vía diplomática, se hará, como en el de los lácteos con destino a Rusia o el arroz a México, ejemplificó. Insistió en la estrategia de que Uruguay no priorizará a China o Estados Unidos, sino que propiciará una buena relación político-comercial sin que prime una vocación ideológica más cercana a una u otra potencia. En cuanto a la negociación Mercosur-Unión Europea, se manifestó deseoso de que la conducción temporal de Alemania despeje algunas interrogantes. Por otra parte, convalidó los reclamos del sector exportador en lo que respecta a infraestructura vial, descentralización de la navegación y reducción de la estructura tarifaria portuaria, que se encuentra a estudio del Ejecutivo. Ratificó el compromiso del Gobierno en trabajar en la logística, la cadena de puertos comerciales y el mejoramiento de rutas y puentes. Asimismo, identificó como “sueños” de la actual Administración dos proyectos: uno que procura favorecer la navegabilidad del río Uruguay con la construcción de un bypass en la zona de Salto Grande y otro que consiste en establecer una terminal portuaria en el río Tacuarí y la zona de La Charqueada, lo que abarataría los fletes de los productores de la región este. En otro tramo de su alocución, Lacalle Pou aseveró que las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) “van a tener un rol importante en nuestro Gobierno” junto con el Banco República (BROU), la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) y el instituto Uruguay XXI.
Apoyo financiero de 100 millones de dólares a pymes
Ferrer recordó que el 70% de las exportaciones se concentran en seis rubros principales: carne y derivados; pulpa de celulosa y productos forestales; oleaginosas, en especial, soja; lácteos; concentrados de bebidas; arroz. Destacó que la celulosa y la soja no eran productos exportables hace 20 años, y en un corto lapso se posicionaron en el segundo y tercer lugar, respectivamente, en las exportaciones de bienes y son foco importante en los negocios del banco. En referencia a la exportación de servicios no tradicionales, como tecnologías de la información y la comunicación, servicios profesionales y financieros, y consultorías, precisó que se consolidaron y que en la actualidad conforman el 40%, lo cual representa unos 2.200 millones de dólares anuales, según registros de Uruguay XXI. Se trata de sectores intensivos en captación de mano de obra calificada, observó. El jerarca precisó que las pequeñas y medianas empresas representan el 77% de las exportadoras, pero solo el 7% del total de las exportaciones, lo que indica que “hay una oportunidad de crecimiento muy importante”. En ese sentido, mencionó que desde fin de 2019 rige un decreto que reglamenta un régimen aduanero especial para las exportaciones del sector que, junto con otras medidas, lo potencian con acuerdos comerciales y tarifas diferenciales. El apoyo financiero que el BROU otorgó a pequeñas y medianas empresas en la coyuntura de emergencia sanitaria por la COVID-19 superó los 100 millones de dólares, informó.
Trabajo en equipo entre el Gobierno y los exportadores
Por su parte, Roth dijo que durante la emergencia sanitaria las exportaciones no se detuvieron, aunque cayeron un 15% en los últimos seis meses, en comparación con similar período del año anterior. Reconoció avances en el trabajo con múltiples organismos estatales, como la extensión de plazos en algunos instrumentos, la eliminación de tasas, flexibilizaciones y modificaciones transitorias. También destacó a la Comisión Interministerial para Asuntos de Comercio Exterior (Ciacex) en su función de organismo coordinador de políticas y ordenador de acciones de financiamiento de las instituciones que promocionan la exportación. La jerarca proyectó que a la salida de la pandemia “el mundo será más chico y altamente competitivo” y habrá que esforzarse más para conquistar mercados y mantener los obtenidos. Será más exigente y serán necesarias más certificaciones, demostraciones de que Uruguay es un país confiable, respetuoso del medio ambiente y dispuesto a avanzar en este sentido. Coincidió con el presidente Lacalle Pou en que Uruguay es visto como un país serio, responsable, colaborativo, coordinado en la actual coyuntura. “Eso es algo que debemos aprovechar”, expresó. Roth se mostró partidaria del trabajo en equipo entre los exportadores y el Gobierno. “Necesitamos mejorar la competitividad, bajando costos, eliminando ineficiencias, evitando la duplicación de acciones y apostando a la digitalización de trámites”, reclamó.
Fuente: Presidencia