Por Javier de León.
Los hechos antes que las palabras.
El entrenador de la selección nacional, Marcelo Bielsa, volvió a excluir de la lista de reservados para la doble fecha de Eliminatorias de octubre, a Luis Suárez.
Idéntica decisión había tomado en setiembre, para los encuentros ante Chile y Ecuador.
Sus palabras expresaron que Suárez era un jugador “convocable”. Antes había mencionado que debía “escuchar y ser escuchado”. Pero los hechos son más fuertes que las palabras.
Marcelo Bielsa no piensa en Luis Suárez como integrante de la selección uruguaya. Por más que sus declaraciones, en las dos conferencias de prensa en las que se refirió al tema, hayan ido en sentido contrario.
Bielsa jubiló a Luis Suárez. Punto final.
Pero el DT, al que no le importa lo que opine o haga la prensa deportiva, pero si le importa la gente, porque no masca vidrio, se ha resistido a asumir ante la opinión pública que sus decisiones, legítimas y con todo el derecho del mundo que le otorga ser el técnico de la selección, que sus decisiones en los hechos están jubilando a Luis Suárez de la celeste.
Bielsa no quiera quedar ante la gente como aquel que jubiló al ídolo. Pero lo está haciendo. Los hechos antes que las palabras. Y cuándo, a principios de setiembre en conferencia de prensa, se le consultó si él consideraba que el ciclo de Suárez en la selección estaba concluido o no, no respondió, se enojó con la interrogante y estableció sin razón que la pregunta no correspondía.
Claro que correspondía. Todas las preguntas, efectuadas con respeto, corresponden.
Y esta más todavía, porque apuntaba directamente a consultar por el pensamiento del entrenador, para brindarle la posibilidad de contestar concretamente, y evitar así las falsas interpretaciones.
La sensación que transmite el DT es que en su pensamiento el ciclo Suárez en Uruguay está concluido. Pero Bielsa no respondió a la pregunta concreta.
Hay argumentos para entender que, en un ciclo largo, hasta el 2026, se pretenda avanzar con el grupo que acompañará potencialmente al entrenador hasta el final. Seguramente ese es el espíritu que anima al técnico argentino, y la base de sus decisiones.
Aunque, si me preguntan hoy si Suárez debe ser citado, en lo personal respondo que HOY sí.
Bielsa tiene el derecho de decidir. Es innegable. También sería bueno que asumiera ante la opinión pública sus decisiones, en lugar de meterse en laberintos de explicaciones, que oscurecen más que aclaran. Porque en los hechos, Bielsa ha jubilado a Luis Suárez.