Como parte del desafío de conservar el sitio patrimonial, se inauguraron nuevas salas en el Museo de la Revolución Industrial, con la finalidad de que los visitantes conozcan cada vez más del emblemático edificio.
El museo de la revolución Industrial suma una nueva sala que, hasta ahora, no formaba parte de la visita guiada. Se trata de la sala de faena, la cual fue recientemente inaugurada. De la misma forma, se agregó tecnología a la visita de la sala de máquinas.
Mauro Delgrosso, director del museo habló con El Rionegrense sobre este tema e hizo referencia a que “la sala de máquinas tiene un nivel de conservación muy bueno pero tenía algunos problemas importantes de impermeabilización y con un proyecto que se inauguró en julio de este año se hizo una mejora en lo que es la interpretación del lugar, con la incorporación de tecnología y de un equipamiento que ayuda a entender la función de la sala”.
En ese sentido indicó que “ayuda a entender la historia de la sala, con entrevistas, con pantallas, con sensores de movimiento, que, a medida que la persona se va moviendo, se van prendiendo las distintas luces que van iluminando las maquinas, con sonidos que simulan que las máquinas están prendidas y en determinado momento uno tiene como la vibración y el sonido ambiente de lo que eran las máquinas, los compresores, en determinado momento se apagan y queda el silencio y uno nota en cierta medida lo que era esa vibración permanente”. Delgrosso contó que “ayuda muchísimo a ambientar e ir a la etapa de trabajo y el momento en que estaba operativa la sala”, sobre esto agregó “después un montón de información a través de pantallas, tablet y proyecciones que van mostrando entrevistas a trabajadores que estuvieron ahí y cuentan que función tenían, como era el trabajo en la sala de máquinas.”
Una vez culminado el recorrido “se logra entender cuál era la función de la sala en relación al gran edificio de la cámara fría, que en cierta forma era el motor de esa gran heladera. Los caños y cañerías que comunican la sala de máquinas con la cámara fría y ahí uno tiene una instancia del recorrido” explicó Delgrosso.
Sobre la visita indicó que “la sala está diseñada para hacer un recorrido aleatorio, tiene varias estaciones, y en cada estación están estos elementos de pantallas y dispositivos que explican la función de cada parte”.
Delgrosso contó que la reparación del techo y las filtraciones se hicieron con mano de obra municipal, “principalmente con la cuadrilla del Sitio, que lo que hicieron fue darle con la tecla al problema prácticamente eterno que tenía, que el edificio se llovía, ese arreglo desde el punto de vista de conservación del edificio fue fundamental porque no se podía poner ningún equipamiento adentro si el edificio se llovía de la manera que se llovía”. Sobre la reparación en si dijo que “era complejo el diagnóstico técnico porque todas las cañerías del edificio tenían agua que se reutilizaba para los compensadores de vapor que estaban en el subsuelo, entonces toda el agua entraba en el edificio. Las cañerías estaban tapadas entonces el agua rebalsaba y el edificio estaba chorreando agua, entonces se logró desafectar, se hicieron desagües nuevos y el techo que estaba en un continuo húmedo empezó a secar. Se mejoraron todas las aberturas, se hizo un encapsulamiento de todas las cañerías de amianto, toda la instalación eléctrica a nuevo y todas mejoras hacen a la conservación del edificio”.
El director del Sitio Patrimonial consideró que “hoy es un atractivo enorme porque realmente es un eslabón más de la cadena de los lugares que se ven, pero a su vez, en sí misma, es una visita que te puede llevar desde 10 minutos a 45 minutos viendo todas las proyecciones, escuchando los sonidos y disfrutando del lugar que parece que se apagó ayer la luz y dejaron de trabajar”. “La sala de máquinas es una de las joyas más importantes que tenemos desde el punto de vista industrial. Y dicho por muchos expertos que vienen, todos quedan con la misma impresión, que es muy poco común ver una sala en el mundo, de esta características, por el nivel de autenticidad que tiene, lo completa que está, lo intacta que está y todo este equipamiento que se pone para que la visita sea mejor, más intensa y disfrutable, la hace un lugar icónico a nivel del patrimonio industrial”, afirmó.
Además indicó que “la persona común, en general, queda fascinado, y prácticamente la foto de los grupos son adentro de la sala de máquinas, con las ruedas, esa ya es una de las fotos imperdibles. Es uno de los lugares más representativos. Nosotros contentos, porque se van ganando espacios, y se van mejorando los lugares que ya estaban”.
Aprovechando la instancia de “Noviembre en Río Negro”se sumó la sala de Faena a visita. “Se inauguró, y se incorporó al circuito la vieja playa de faena, si bien el edificio tuvo otros usos, pero ahí nosotros podemos explicar cómo era la faena antigua, la faena del siglo XIX, y como es la faena moderna, con el riel, con la roldana, con el sistema fordista, es un gran avance desde el punto de vista de la conservación, porque además de ser el único Patrimonio Mundial de la Carne, podemos demostrar y explicar, sistemas antiguos de faena así como también sistemas modernos, ese es el gran período de tiempo que cubrió esta fábrica”, explicó.
El director también adelantó que “para La Noche de los Museos vamos a presentar a la gente un nuevo espacio que nadie conoce, que es un espacio fantástico, que es la sala de salazón de la vieja Liebig´s, y eso es la búsqueda de nuevos espacios que es permanente para ampliar la oferta al público”. Delgrosso agregó que esa es parte del desafío del sitio “sabemos que es un sitio desafiante, por el tamaño y la enorme cantidad de tiempo que cubre y estuvo operativa la fábrica”.