Se trata de un grupo de jóvenes que crean pintura para realizar murales a partir de colillas de cigarrillos. Desde ahora se instalarán centros de acopio también en Fray Bentos.
“No Más Colillas surge el 5 de Junio de 2019, en el Día Mundial del Ambiente, de la necesidad de plantear una solución al impacto ambiental que generan las colillas de cigarros en el ambiente”, explicó Joaquín Bentancor uno de sus impulsores a El Rionegrense. “Desde ese entonces, concientizamos a la población sobre el impacto de este residuo en el ambiente y brindamos soluciones para recolectar y reciclar las colillas de cigarros”, agregó.
Joaquín explicó como es el proceso, “todas las colillas de cigarros que recuperamos, son recicladas por Teko, una empresa de reciclaje que revaloriza este residuo, y lo transforma en pinturas al agua”.
El joven dijo que “En alianza con Teko, estamos pintando murales con pinturas recicladas con colillas, en 50 centros educativos de todo Uruguay, que se sumaron este 2022 a nuestro programa de educación ambiental Sembrando Conciencia”, en ese sentido manifestó “Sembrado Conciencia es un programa de educación ambiental que invita a jóvenes a tomar acción, juntando colillas y otros residuos, para luego revalorizarlos”.
Aquí en Fray Bentos, están trabajando con estudiantes del Liceo 3 que se encargarán de instalar envases en distintos lugares de la ciudad para que se puedan dejar las colillas, que después se convertirán en pintura.
La docente Leticia Margni explicó que quienes estarán trabajando son “Estudiantes de 3er año turno matutino del Liceo 2, quienes se sumaron al programa Sembrando Conciencia liderado por Joaquín Bentancor que tiene como objetivo recuperar las colillas de cigarro para su posterior reciclaje”. Sobre el trabajo realizado dijo que “los estudiantes de este liceo identificaron a este residuo como un potencial contaminante del agua y además la preocupación que es un residuo que se encuentra en cualquier lugar. También conocieron que es un residuo que se puede reciclar para obtener diferentes productos: pinturas, armazones para lentes, placas”. Desde el liceo se realizaron diferentes etapas:- Identificación del residuo como un potencial contaminante; recolección de colillas de cigarro en puntos cercanos al liceo y sensibilización a la comunidad que veían nuestra trabajo; elaboración de 10 contenedores para ser distribuidos en puntos estratégicos y elaboración de un mural diseñado por los estudiantes con pintura fabricada con el reciclaje de las colillas de cigarro.
Los representantes del proyecto también se reunieron ayer con el Intendente Omar Lafluf para explicarle la iniciativa. “Desde NMC, generamos alianzas con locales comerciales, que funcionan como centros de acopio en todo Uruguay, para que las personas que quieran entregar colillas de cigarros, para ser recicladas, lo puedan hacer”, explicó.
Consultado sobre porque trabajar con colillas de cigarrillo, Joaquin indicó que “en Uruguay, el 20% de la población adulta consume cigarrillos, aproximadamente unas 500.000 personas. El promedio de consumo diario de un fumador es de 10 cigarrillos por día. Por ende, solo en Uruguay, por día, se descartan más de 5.000.000 de colillas de cigarros”. Además, dijo que “según estudios, 1 sola colilla de cigarro puede contaminar hasta 50 litros de agua. Estos datos, nos dan la pauta de que el problema parece pequeño, pero es más grave de lo que creemos. Eso es lo que nos motiva a resolver este problema, la falta de información, y la poca conciencia que había (hay) sobre el impacto de las colillas en el ambiente. Motivados también por la idea de que se disminuya el consumo de cigarros, por su impacto negativo en el ambiente, y en la salud de las personas y los demás animales”.
En la web y redes sociales del proyecto pueden ver el mapa NMC con los centros de acopio. “El próximo año, sumaremos 50 nuevos centros educativos, con los cuales trabajaremos la problemática de las colillas de cigarros, y el impacto de los residuos en general”, indicó.
En el equipo trabajan cuatro personas, que llevan adelante diferentes tareas. “Nicolás, fundador de Teko, es quien se encarga de toda el área comercial de NMC, del servicio de gestión de colillas que ofrecemos a otras empresas. Claudia, coordinadora de Sembrando Conciencia, encargada de coordinar las giras por todo Uruguay, y principal nexo con los docentes y maestras. Giuliano, encargado del taller, donde fabricamos ceniceros de metal para el servicio de alquiler de ceniceros para empresas. Yo (Joaquín), coordinador general de NMC, enfocado hoy en día principalmente en la parte social y educativa del proyecto”, manifestó.
La iniciativa cuenta además con una red de voluntarios de más de 500 personas en todo Uruguay además de alianzas con otras organizaciones.