Jugadores e integrantes del cuerpo técnico de Treinta y Tres golpearon al juez Bruno Rodríguez luego de su eliminación en Florida.
Este fin de semana fueron los cuartos de final de la Copa Nacional de Selecciones, con las clasificaciones de San José y Canelones por un lado del cuadro (eliminando a Maldonado y Rivera, respectivamente) y las de Lavalleja y Florida por el otro.
Mientras Lavalleja derrotó a Tacuarembó 3-1 como local luego de haberse impuesto 2-0 a domicilio en la ida, el que será su próximo adversario pasó bastante más trabajo frente a Treinta y Tres en el estadio Campeones Olímpicos, donde hubo un lamentable episodio al final.
Raúl Giménez y Facundo Carapé adelantaron al local, pero un autogol de Fabio Ghirardi a los 62’ y un tanto e Santiago Suárez a los 64’ pusieron en carrera al elenco olimareño, que a los 68’ se quedó con uno menos por la expulsión de Fernando Acosta. Con el 2-2 iban a penales porque en la ida se dio ese resultado.
Buscaba la hazaña a domicilio Treinta y Tres, pero Canapé y Diego Torres sentenciaron el pleito en los minutos finales. Momentos después de haber terminado el partido, jugadores del equipo perdedor y el cuerpo técnico se abalanzaron sobre el árbitro Bruno Rodríguez, a quien agredieron por entender que los perjudicó.
El juez de San José había tenido un acalorado ida y vuelta con los jugadores del cuadro rojo del este, expulsando a su delegado y amonestando a varios suplentes que le reclamaron por su polémico arbitraje. Al momento de la agresión, la guardia privada no pudo impedir los hechos de violencia.