La Simona no saldrá en el próximo carnaval. La pandemia y la situación económica fueron determinantes para que los responsables decidieran parar por un tiempo y no competir. Fueron 10 años de muchos logros, muchas llamadas y mucho desfile pero sobretodo de generar un vínculo especial con la ciudad.
«Familia Simonera, barrio querido, vecinos, comunidad Fraybentina, rionegrense, comunidad cultural de todo el país. Queremos hacer llegar por este medio las decisiones tomadas después de un conmovedor, largo y difícil estudio de la situación» así comenzaba la publicación en redes sociales con la que los responsables de La Simona anunciaban que la comparsa cerraba una etapa.
La Simona no participará del próximo carnaval, una decisión que tomaron los responsables del conjunto después de evaluar la situación sanitaria y económica producto de la pandemia. El Rionegrense habló con Mauro Barret y Carina Dalmás sobre esta decisión y las sensaciones que tienen. “Es una sensación rara, fue una decisión muy pensada, por lo que tiene que ver la pandemia. Consideramos que el factor desencadenante de la no salida es un tema de tener que seguir cuidándonos entre todos, la pandemia no terminó y sigue estando ahí”, explicaron. En ese sentido Dalmás manifestó que “la responsabilidad de llevar 150 personas es mucha, la convivencia que se tiene que realizar en más de un día, en clubes deportivos, en el ómnibus, en lo que tiene que ver con el cuidado de la comparsa y la sociedad en sí, y de la ciudad donde vivimos que es lo más importante”. Los responsables de La Simona consideran que con la situación sanitaria cabe la posibilidad que en algún momento tengan un caso positivo y son 150 personas. “A todo eso se le suma un tema económico, que no escapa a la realidad. Es muy difícil tocarle la puerta a cada vecino, como lo hemos hecho en otras oportunidades, que Fray Bentos y muchos lugares del interior, nos compran cuando sacamos la rifa a la calle y no estamos ajenos al tema económico. Y que ir y pedir que nos paguen 4 cuotas de $300 se está haciendo muy complicado. Y nosotros nos financiábamos con eso, con los beneficios que hacíamos durante el año. Eso lo vamos a tener que agradecer siempre”, explicaron.
La Simona nació en Marzo de 2011, fueron 9 carnavales, donde lograron ubicarse entre las mejores del país. “Fueron 9 febreros consecutivos, haciendo llamadas, conviviendo con la gente, con el barrio, con las sociedad nuestra y las de otros departamentos como fueron Durazno, Salto, Paysandú o Montevideo”, afirmó Dalmás.
Barret, uno de los directores responsables contó cómo se fue generando su vínculo con el candombe y como la comparsa nació casi sin querer. “Fue un descubrimiento, nosotros estábamos lejos de todo lo relacionado al candombe y mi hermano se relacionó con una comparsa. Un día decidió dejar de estar en esa comparsa y ahí fue que armó La Simona en la noche del cumpleaños de mi abuela”, contó. Sobre eso agregó “Ahí nos fuimos interiorizando un poquito, empezamos a ver todo lo que es la historia, la parte cultural, la parte ancestral, el respeto que hay que tener sobre el tambor, como se toca, que representa, la indumentaria, y eso te lleva a tener respeto por el candombe y obviamente que al ser tan nuestro empezás a disfrutarlo, a sentirlo y amarlo definitivamente. A la comparsa la integraban entre estandarte, banderas, trofeos, cuerpo de baile, gramilla, escoberos y cuerda unas 140 personas a las que se deben sumar los colaboradores.
La Simona logró varios primeros premios, y hasta llegaron a ganarse su lugar en Isla de Flores. De todas maneras Dalmás destaca como logros el vínculo que generaron con la gente y con el grupo en sí. “Lo que más destacamos es la unión del grupo, porque no es fácil la convivencia de tantas personas y eso se logró, el respeto por el otro, el espacio, el aceptar como grupo ciertas reglas y condiciones de convivencia, y ese fue el mayor logro de la comparsa en sí. Después si, estuvieron esos logros en puestos, pero lo más importante es la parte humana y colectiva”, afirmó. La Simona siempre estuvo muy vinculada con la ciudad de Fray Bentos y lograron transcender los límites del departamento. Sobre eso Dalmás contó que cuando dieron la noticia de que cerraban esta etapa “Recibimos de diferentes referentes de comparsas de Montevideo, de directores de asociaciones, también de acá de fray bentos, ese cariño, aparte de todo lo que recibimos vía redes sociales, nos llegaron mensajes que no podíamos creer. Creo que nunca fuimos conscientes de lo que generaba La Simona”
Una anécdota
Después de tantos años y tantas llamadas. Hablar de una sola anécdota es difícil. Pero en la memoria y en la retina de los integrantes de La Simona no se borrarán las llamadas en Montevideo cuando en el momento de desfilar comenzó a llover, “la cuerda explotaba, las chiquilinas, las banderas, la gramilla, la comparsa estaba bien parada. Llegamos a la televisación, la cuerda se plantó, el cuerpo de baile también, se hizo el corte, hasta que nos dicen que el jurado se había ido. La gente había salida de sus lugares y se habían puesto de atrás de comparsa”, contaron. “No teníamos donde quedarnos, los chiquilines querían quedarse y desfilar. Dormimos en lo que teníamos, secamos todas las cosas para poder desfilar y nos volvimos a presentar”. Incluso, el presidente del jurado nos felicitó por la actitud de quedarnos.
El vínculo con el barrio.
La Simona siempre intentó mantener un vínculo con el barrio, muchas veces desde lo social. Incluso en el comienzo de la pandemia realizaron merienda solidaria para entregar a los niños del barrio. Varios años también realizaron actividades por el Día del Niño como una forma de devolver a la sociedad.