El bisemanario nació como iniciativa de Omar Rovelli, y su primera edición fue en 1973. El 7 de noviembre cumplimos medio siglo de comunicación ininterrumpida con nuestros lectores.
“El Rionegrense es y será un periódico independiente, ajeno a toda corriente política, religiosa o filosófica, en nuestras páginas tendrán cabida todas las inquietudes que signifiquen progreso y si de algo nos sentimos felices es de ser uruguayos, primero antes que todo, y de pertenecer al departamento de Río Negro”, así comenzaba hace 50 años la portada de El Rionegrense, estableciendo en esas líneas Nuestro Propósito, propósito que se mantiene desde su fundación hasta ahora. Actualmente El Rionegrense es dirigido por Adrián Rovelli quien continuó con el legado de su padre.
Adrián acompañó a su padre desde los comienzos del diario, en lo que fue primero un anhelo y pronto una realidad. “El primer recuerdo que tengo es la elaboración del periódico, que se hacía al estilo de la vieja imprenta y lo recuerdo también cuando fui repartidor”, contó.
Rovelli decidió desde 2020 hacerse cargo del emprendimiento que por 47 años había estado al frente de su padre una vez que este decidió jubilarse. Por ese motivo y para que no se perdiera un legado tan importante comenzó a trabajar en la dirección del medio y sumó a su edición bisemanal un portal de noticias www.elrionegrense.com.uy “Cuando mi padre decide cerrar El Rionegrense, después de pensarlo y analizarlo le plantee la posibilidad de continuarlo, más que nada para mantener la fuente de trabajo y viva una empresa que él fundó”, comentó.
Actualmente El Rionegrense es el único medio escrito del departamento y continúa asociado a la Organización de la Prensa del Interior. “La prensa escrita ha sido clave en la libertad de prensa a nivel mundial y obviamente en Uruguay. La prensa escrita en Uruguay se ha ido transformando con el tiempo y obviamente que la prensa es en al algún momento control de la democracia, en el sentido de que está mirando lo que hace el gobierno y analizándolo y eso lleva a determinadas situaciones, incluso a remover un ministro”, contó. También se refirió al futuro del medio, “creo que El Rionegrense debe mutar o ampliar su espectro hacia los contenidos audiovisuales”.
El Rionegrense emplea directa e indirectamente a 5 personas y llega a más de 200 familias en Fray Bentos y Nuevo Berlín. Además de las personas que leen las noticias por sus medios digitales, web y redes sociales.
Uno de los repartidores, Rubén trabaja en El Rionegrense hace 8 años, “El Rionegrense está presente desde mi juventud, yo tenía 20 años y ya lo había empezado a recibir. Ahora hace 8 años que estoy trabajando. Me gusta, he conocido gente y cada vez que voy a dejar el diario es una conversación con el cliente, es un diálogo y eso es lindo”.
También Elbio trabaja como repartidor desde hace 10 años “El Rionegrense es un modo de vida, de trabajar. Me gusta estar en contacto con la gente, conocí toda clase de personas en estos 10 años”.
En el arte de armado del diario trabajan, Sabrina, Silvina y Ana. Sobre lo que representa el bisemanario, Sabrina, la diseñadora gráfica dijo que “El Rionegrense para mí, como diseñadora gráfica fue un medio por el cual pude generar experiencias en el mundo de los medios de comunicación uniéndolo con mi profesión. Además, me permitió, aprender más junto a un gran equipo de trabajo, sobre lo importancia de comunicar haciéndolo con responsabilidad y compromiso”.
Ana, que se encarga de coordinar y escribir algunas de las notas comentó que para ella trabajar en El Rionegrense es conectarse con una de sus pasiones. “El periodismo es uno de mis grandes amores y pasiones. El Rionegrense me dio la oportunidad de volver a conectar con mis inicios en el mundo del trabajo, volver a sentir la adrenalina de la noticia, de la pregunta incómoda, descubrir historias y personas”, comentó.
Por su parte Silvina dijo “El Rionegrense es mi primer experiencia laboral en el mundo de la comunicación, desde que comencé a formar parte del diario he aprendido un montón de cosas, me he dado cuenta de qué es lo que realmente me gusta de la comunicación, qué es lo que me sale mejor y lo que no. Todo esto sumado al equipo re lindo que formamos junto con Ana y Sabri. Con ellas no solo hacemos nuestro trabajo sino que hemos creado una linda relación y eso, para el ambiente laboral, es súper importante. Me gusta mucho formar parte del equipo de El Rionegrense, vivenciando sus cambios y su evolución como medio de comunicación”.