El entrenador de la selección uruguaya, Marcelo Bielsa, expresó su descontento con la organización de la Copa América y defendió a sus jugadores tras los incidentes con aficionados colombianos después de la semifinal. Según Bielsa, los jugadores actuaron en defensa de sus familias, una reacción que considera comprensible.
El incidente ocurrió tras la derrota de Uruguay 1-0 ante Colombia en Charlotte, Carolina del Norte. Los jugadores uruguayos subieron a las gradas y se enfrentaron con los aficionados colombianos. Según informes, los familiares de los jugadores uruguayos fueron agredidos en las gradas.
Bielsa criticó a la Conmebol, la entidad organizadora del torneo, por abrir una investigación contra Uruguay en lugar de garantizar la seguridad de las familias en el estadio. «La responsabilidad de proteger a los aficionados en las gradas no recae en los jugadores», dijo Bielsa. Añadió que sus jugadores actuaron como cualquier persona lo haría al ver a sus seres queridos en peligro.
La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) también destacó la falta de seguridad en el estadio, calificando la reacción de los jugadores como «comprensible desde el punto de vista humano». Sin embargo, condenó enérgicamente la violencia.
La Conmebol no ha respondido a las acusaciones de falta de seguridad y está investigando a 11 jugadores uruguayos. El ministro de deportes de Uruguay, Sebastián Bauzá, anticipó que algunos jugadores podrían enfrentar sanciones que les impedirán participar en los próximos partidos de clasificación para la Copa del Mundo.
Uruguay competirá por el tercer puesto de la Copa América contra Canadá el sábado en el Bank of America Stadium de Charlotte.