La Sociedad de Productores Forestales (SPF) se compone de más de 100 productores forestales, profesionales independientes y empresas contratistas del sector forestal que se dedican a la producción de celulosa o transformación mecánica de la madera. La principal función de esta sociedad es actuar en defensa de la producción forestal.
A raíz del incendio forestal que afectó alrededor de 35.000 hectáreas de campo en los departamentos de Río Negro y Paysandú y fue denominado el más grande en la historia del Uruguay, ElRionegrense habló con el Ing. Agrónomo Nelson Ledesma, presidente de la Sociedad de Productores Forestales, sobre las primeras evaluaciones al respecto.
Cabe destacar que por la tarde de ayer, miércoles 5 de enero, luego de haberse extinguido el fuego casi por completo, Ricardo Riaño, Director Nacional de Bomberos, informó sobre la reactivación de cuatro focos del incendio en el área forestal de Algorta. Se trata de puntos de fuego que se reavivaron en zonas previamente quemadas, por lo que no debería presentar mayor dificultad para controlarlos en las próximas horas.
Evaluación primaria sobre el incendio.
Tras una evaluación primaria por parte de la SPF, se sabe que el incendio se extendió por alrededor de 22.000 hectáreas, de las cuales 15.000 eran predios forestados, mientras que por parte de Bomberos, se asume que se trata de unas 35.000 hectáreas en total.
Pero, aunque no hay una evaluación final sobre las dimensiones reales del incendio, debido a que todavía no se logró la extinción total del fuego, se estima que se trata de grandes pérdidas, no sólo a nivel de empresas, sino también de productores de la zona.
En ese orden, Ledesma indicó que ya se está trabajando para brindar soluciones a los productores que perdieron su producción en el incendio, así como también, a los vecinos que se preocupan por el riesgo que significa la cercanía de los centros poblados con las plantaciones forestales. En este sentido explicó que todas las plantaciones respetan las leyes establecidas y aseguró que “en muchos casos sucedió que se fueron juntando la forestación con los poblados por el crecimiento de los pueblos, pero vamos a corregir eso para darle seguridad a la gente”.
Cabe destacar que por parte de las empresas se asume la responsabilidad del siniestro, más específicamente por parte de las dos empresas más grandes, se muestra intención de evaluar los daños ocasionados para ver de qué forma se pueden ir reparando y dando soluciones a los distintos productores afirmó el presidente de la SPF.
Productores que perdieron alambrados, zonas de pastoreos de ganado, colmenas y vecinos que están preocupados por el riesgo que significó tener el fuego a pocos metros de su casa, no solo recibirán apoyo del estado sino también de las empresas privadas, pero primero se precisa una evaluación de lo sucedido.
Por otra parte, en lo que tiene que ver con productores ganaderos, el presidente de la SPF dijo que se les brindó la posibilidad de prestarles campos para que los animales puedan pastar allí.
En base a la consulta sobre los daños a nivel empresarial que ocasionó este gran siniestro, Ledesma indicó que son seis empresas las que se vieron mayormente afectadas. Se trata de pérdidas muy grandes, pero la evaluación por parte de las empresas lleva tiempo, debido a que influyen diferentes cuestiones como la diferencia en la edad de las plantaciones o la diferencia de intensidad del fuego en las distintas zonas.
Hay lugares en los cuales el fuego paso muy rápido, a raíz del viento y en otros el fuego se estabilizó más, por lo que fue más intensa la actividad y la pérdida.
Hay lugares con daños que se pueden revertir y otros con daños irreversibles.
En tanto, teniendo en cuenta que la madera quemada estaba destinada a la producción de celulosa, aserraderos o transformación mecánica de la madera, se sabe que la industria mayor afectada es la de la celulosa.
Cabe destacar, que dentro de las pérdidas, hay parte de la madera quemada que aún se puede utilizar como producción de energía para las industrias, es decir leña.
Origen del incendio y sistema de autoprotección.
Ledesma contó que se fiscaliza todo el tiempo de forma aérea para poder detectar incendios y que existe un “sistema de autoprotección” de las empresas para combatir incendios forestales, debido a que, ante estos siniestros, no pueden depender de bomberos, ya que los recursos no suelen ser suficientes para este tipo de incendios.
Por este motivo, cuentan con este sistema para poder combatir por sus propios medios los incendios que año a año se registran.
Este sistema, divide el país en tres regiones, zona sur noreste, con base en el departamento de treinta y tres; zona norte con base en Tacuarembó y zona litoral con base Rio Negro. En cada una de estas bases hay un helicóptero especialmente equipado así como también, se cuenta con profesionales capacitados para combatir incendios forestales. Cada helicóptero cuenta con una brigada de bomberos profesionales para actuar mediante un sistema de “ataque rápido”.
También se cuenta con 6 aviones, contratados a 15 torres del país, que controlan diariamente la zona forestal y establecen índices de riesgo. Estos aviones tienen rutas específicas, que les permite identificar fácilmente posibles focos de incendio.
En caso de que el avión identifique un foco, lo sobrevuela, toma imágenes del incendio y lo reporta a la base correspondiente. Desde la base, se hace un análisis de riesgo y se evalúa la necesidad de enviar el helicóptero, que son los que llevan el agua para apagarlo.
Además esto se complementa con el “ataque en tierra” que consta de todo el equipamiento que las empresas poseen para combatir incendios además del entrenamiento que tienen personal de las empresas y cuadrillas contratistas.
Es importante destacar que en los últimos 30 años se han detectado más de 1500 incendios en predios de plantación forestal, los cuales se han podido controlar con este sistema de “ataque rápido”.
Este sistema de autoprotección, es evaluado de forma constante y se trata de actualizar metodologías y tecnologías, tomando referencias de otros países más avanzados.
En este caso este sistema no fue suficiente, debido a que fueron dos focos grandes, en simultáneo y en dos zonas diferentes, por lo que se tuvo que desplegar un operativo coordinando de acciones en ambos lugares.
Por otra parte, el viento, las altas temperaturas y la humedad relativa muy baja hizo que el fuego propague con rapidez, por lo que en poco tiempo, tomó una gran virulencia. Ledesma contó que hubo momentos en q el fuego recorrió 15km en 2 horas.
Estas condiciones extremas no pudieron ser combatidas por este sistema de “ataque rápido”.
Por otra parte, el presidente de la SPF mencionó el tema de los matafuegos. Este método que en más de una instancia no funcionó ya que se trató de un incendio que tomó altura, debido a los árboles y las llamas al caer desde estas alturas los atravesaban con facilidad, así como atravesaron las rutas, 24, 25 y 90.
En lo que refiere a los recursos destinados a combatir este siniestro, aún no se tiene una evaluación sobre si fueron suficientes o fueron escasos.
Medidas de seguridad que deben tener los predios forestales.
Ledesma indicó que los proyectos forestales requieren autorizaciones desde la Dirección Forestal y el Ministerio de Ambiente.
En lo que tiene que ver con incendios, se tiene en cuenta el diseño de plantación de los proyectos, para determinar las exigencias específicas que cada uno requiere.
Hay exigencias de distanciamiento de las plantaciones a los centros poblados, a caminos vecinales, a rutas, así como también sobre la cantidad de corta fuegos, recursos hídricos, mantenimiento y tamaño máximo de rodales que se pueden tener, entre otras.
Con respecto a los cortafuegos y recursos hídricos, es decir la presencia de hidrantes, Ledesma indicó que no se puede asegurar que todos los predios afectados hayan tenido en condiciones óptimas estas exigencias, pero también se tiene que tener en cuenta que la magnitud del fuego puede haber sobrepasado los límites de prevención de estas medidas.
El presidente de la SPF explicó que esto también tiene que ver con la relación inversión / probabilidad, ya que este incendio tuvo características extremas, por lo que quizás, hay determinadas cosas que no estaban preparadas para afrontarlo, debido a que no es común que los incendios forestales tomen esta magnitud.
En lo que tiene que ver con las exigencias sobre la distancia que debe haber entre las plantaciones forestales y los centros poblados, Ledesma asegura que todos los predios cumplen con los requerimientos legales, pero es una realidad que en estos años se han ido juntando las zonas pobladas y las plantadas, como es el caso de Piedras Coloradas y esto es un riesgo.
Por este motivo, se están reevaluando estas medidas, no solo para nuevas plantaciones sino también para las actuales.
Recursos humanos y voluntarios que colaboraron para combatir el incendio.
Ledesma agradeció a los voluntarios que estuvieron al firme ayudando en lo que se podía, remarcó un aspecto positivo, dentro de toda esta tragedia, que fue el hecho de que no se lamentó ninguna complicación en lo que tiene que ver con personas.
El presidente de la SPF hizo referencia a un tema particular que fue el hecho de que en medio de las llamas, hubo productores a los cuales no se les dejó entrar a sus predios, como por ejemplo apicultores, que no pudieron ingresar a quitar las colmenas o voluntarios que buscaban combatir el fuego. Sobre este tema, aclaró que fue por orden de bomberos debido a que, personas que no poseen la capacitación necesaria para este tipo de situaciones, pierden la noción del riesgo al que se exponen y es muy peligroso.
En este orden, cabe destacar que en total fueron más de 250 personas que trabajaron entre voluntarios, personal capacitado de empresas, personal de bomberos, personal del ejército, vecinos etc. Y a pesar del gran número de colaboradores, no hubo daños, ya que se cuidó mucho la integridad de las personas.